Reivindicar grandes talentos ignorados es una de las cruzadas de esta nuestra querida página magnetofono.com y a ese empeño nos sumamos con D.L. Byron.
This Day and Age, editado en 1980, es uno de los mejores ejemplos del power pop nuevaolero en su máximo esplendor a la altura de Elvis Costello o Graham Parker, pero salvo un primer single con videoclip incluido que sí programó MTV, Listen To The Heartbeat, este artista originario de Nueva Jersey no tuvo continuidad.
David L. Byron compone las diez soberbias canciones del álbum acompañado por una vigorosa banda con músicos que habían trabajado con Billy Joel, además de la sólida producción del experimentado Jimmy Iovine (U2, Patti Smith, Tom Petty, Pretenders, Dire Straits, Bob Seger… ¡¡¡Enrique Iglesias!!!).
Latidos
Listen To The Heartbeat supone un estallido directo al corazón, "escucha el latido" dice en una intensa relación amorosa y sexual. Base a toda pastilla de Thommy Price (batería) y Joey Vasta (bajo), punteos incendiarios de Tom Morrongeillo, la voz recia de Byron y coros. Todo esto en solo 105 segundos.
21st Century Man es otro ejercicio rockero poderoso con las incesantes baquetas de Price, Byron se desgañita al proclamar que ya es un hombre del siglo venidero con su guitarra de 12 cuerdas y la solista de Robert Sarzo.
Sin tiempo para la recuperación continuamos con una de sus más grandes canciones, Big Boys. Ritmo con mucha garra, los punteos de Morrongeillo, un estribillo arrebatador y toda una declaración: "El día que dejé que entraras en mi vida fue mi último error (…) los chicos grandes nunca lloran".
Atractivos fraseos de Sarzo preceden en Get With It la entrada de Byron que se va encorajinando y ese clímax se sucede en la fantástica Love In Motion, crescendo como le pasa al 'amor en movimiento', Byron secundado por unos coros envolventes y punzante solo de Morrongeillo.
Adrenalina
Brutal, como mínimo, es No Romance, No Weekend, No Love, la pura adrenalina para comenzar la cara B con un Byron cabreado porque sin romance ni amor no hay fin de semana.
Pero no todo es negativo, le sigue Am I Falling In Love en la que nuestro protagonista se calma un pelín preguntándose si se ha vuelto a enamorar, amparado por el solo de Sarzo y la segunda voz deMichael Kenny.
Batería enloquecida de Price y bajo de Vasta para unas guitas hipnotizantes de Sarzo, la rítmica de Matt Lambert y el canto a Lorryanne "ven lo más rápido que puedas, sabes que te sigo queriendo". Otra maravilla.
Today, un R&R en toda regla con efectivos cambios y Byron en plena forma para un estribillo cautivador con los coros.
La chica del camerino, Backstage Girl, cierra en tono más pausado este formidable LP de apenas media hora más que bien aprovechada.
Ganó un Grammy
DL Byron incluyó ese mismo 1980 una estupenda versión de You Can't Hurry Love de Diana Ross & Supremes en la banda sonora de la película Times Square, pero Arista no consideró rentable editarle más discos.
Dedicado a la composición su tema Shadows Of Knight le valió un Grammy a Pat Benatar. Fue el momento de mayor gloria de este artista del que poco más hemos sabido, salvo algún disco más tranquilo. Gozemos de sus latidos en el irrepetible This Day And Age
¡A disfrutarlo, háganme el favor!
D.L. BYRON - THIS DAY AND AGE (1980)
.1. Listen To The Heartbeat
.2. 21st Century Man
.3. Big Boys
.4. Get With It
.5. Love In Motion
.6. No Romance, No Wekend, No Love
.7. Am I Falling In Love Again
.8. Lorryanne
.9. Today
10 Backstage Girl
. Todas las canciones compuestas por DL Byron.
- Otros discos recomendados: Times Square (BSO, 1980), Exploding Plastic Inevitable (1998), Itz (2004).
El destino es a veces cruel cuando la fatalidad de un accidente siega la vida de personas que se hallan en plenitud.
Tal fue el caso del notable cantautor Jim Croce, que murió el 20 de septiembre de 1973 al estrellarse a causa de la niebla la avioneta en la que se trasladaba de un concierto a otro en el estado de Luisiana. No llegó a cumplir los 31.
Otis Redding, Buddy Holly, dos miembros de Lynyrd Skynyrd, Stevie Ray Vaughan, Patsy Cline, Ritchie Valens... son otros músicos norteamericanos cuya carrera quedó desgraciadamente truncada en aviones que nunca llegaron a su destino.
Magnetófonoha glosado repetidamente la figura deBruce Springsteencomo uno de los más grandes de la historia del rock, pero quizás es menos conocido que entre sus muchas virtudes también destaca la generosidad para 'regalar' en primicia canciones a otros artistas. Tal es el caso de la sublime 'Fire' paraRobert Gordon.
Han pasado 30 años, pero la denuncia de la violencia machista, el racismo y el quebranto de los derechos humanos que proclamaba Tracy Chapman cuando irrumpió de forma grandiosa en la escena musical siguen, a nuestro pesar, plenamente vigentes.
Las descarnadas canciones de esta cantautora de Cleveland, envueltas en una cautivadora belleza, afortunadamente sí encontraron el eco en la audiencia al ganar su disco de debut tres Grammys y vender millones de copias.
Asimismo, adquirió proyección mundial al participar en el multitudinario homenaje en Wembley a Nelson Mandela por su 70 cumpleaños, en junio de 1988.
Willy DeVille, un fideo afincado en Nueva York con varios dientes de oro, tupé de vuelta y media, camisas con chorreras y trajes que bien podría haber cortado el sastre de Al Capone, no encajaba mucho a mediados de los 70 en el convulso movimiento punk aunque fue uno de los asiduos del templo CBGB compartiendo cartel con Ramones, Blondie, Patti Smith, Talking Heads, Fleshtones o Damned.
Bajo el nombre de Mink DeVille su disco de presentación, Cabretta (1977), resultó todo un hallazgo. En vez de mucho ruido y poses desafiantes, William Paul Borsey Jr.bebía del Rhythm & Blues y del sonido Phil Spectorcon ramalazos latinos, así como posteriormente del cajun de Nueva Orleans.
Llega el verano y las cortas vacaciones para la mayoría de los mortales, excepto para algunos privilegiados que disfrutan del estío todo el año como Jimmy Buffett, un simpático ’bon vivant’ siempre bronceado que entre paseos en barco y margaritas compone y canta canciones.
Millonario para más señas, merced a su imperio de restaurantes, casinos, fábricas de cerveza, inmobiliarias y, desde luego, una exitosa carrera musical cuyo estilo podría describirse como un tropical country-folk-rock aderezado con animosos destellos de R&R, guiños latinos y un hedonista sentido del humor, reflejado también en su faceta de escritor.
James William Buffett vino al mundo el día de Navidad de 1946 en Mississippi, la infancia la pasó en Alabama y empezó su carrera musical en la meca del country, Nashville, pero fue ya en los 70 cuando descubrió su verdadero vergel en los cálidos cayos del sur de Florida, especialmente en Key West.