Que levante la mano quien piense que hay pocas sensaciones más agradables que descubrir una canción de un artista cuya existencia desconocías y saber, de inmediato, que se incorporará a la banda sonora de tu vida. 

Y que levante la otra mano quien piense que hay pocas sensaciones más desagradables que descubrir que estás de más en una relación y que alguien tiene la intención de sacarte, de inmediato, de la banda sonora de su vida. 

Quienes tengan las dos manos en alto disfrutarán con 'Sure', una de las cinco canciones que la australiana Hatchie (Harriette Pilbeam) ha incluido en el EP 'Sugar and Spice', recién publicado. 

Hatchie pertenece a ese grupo de intérpretes de voz deliciosamente dulce a las que les bastan tres guitarrazos para esquivar cualquier atisbo de sensiblería. Heredera directa del sonido de los Primitives, de los Sundays y de Teenage Fanclub, la cantante de Brisbane pone sobre el mostrador un pop primaveral y lleno de luz, por mucho que sus textos hablen de las pequeñas miserias que nos acechan en cualquier estación del año.

'Sure' es una despedida. Pero en el momento del adiós la autora intenta, al menos, sembrar una duda en la cabeza de quien está diciéndole que ya le sobra.

"Dices que quieres que esto termine, pero ¿de verdad que ha terminado? ¿Y si no es así? Yo no me rindo. No estoy segura, pero sí lo estoy de que puedes hacerme cambiar de opinión. ¿Es que quieres seguir sin mí?".

 Hatchie comenzó sus andanzas musicales en un grupo llamado Babaganouj (sí, como el delicioso plato árabe). Tras declararse independiente, ahora reúne sus cinco temitas favoritos en 'Sugar and Spice' (sí, como la canción de los Searchers), una declaración de intenciones sobre los ingredientes con los que quiere cocinar su música: una pizca de dulce, otra pizca de picante. El cóctel es más que apetecible. Nos encantará repetir.