Cuando se pusieron nombre, The Blow Pops -un singular tipo de piruletas- ya dejaron clara su misión: fabricar un delicioso surtido de golosinas con la elasticidad adictiva del chicle, la dulzura mullida de las gominolas y el suave amargor de la fresa ácida.
Nativos de Milwaukee, solo les hicieron falta un par de discos para ganar su cátedra como consumados orfebres del pop de guitarras: "Charmed , I´m Sure" (1993) y "American Beauties" (1994).
El primero, más psicodélico, hasta incluía una mini rock ópera en cuatro tiempos, "Under the Big Top". El segundo, ligeramente más rockero, era una radiante sucesión de armonías, estribillos y brillantes arreglos . Los dos, obras cumbre del power pop de los noventa.
"Estoy arrojando monedas en una fuente por tu amor
tres centavos para flores aquí no son suficientes
Estoy arrojando monedas en una fuente por tu amor"
La juguetona "Storybook" abría "American Beauties", con sus coros ingenuos, sus guitarras de caramelo y su rendida declaración de amor inocente e incondicional: "Tú eres mi libro de cuentos soñado"
"Cuando la primera cae, solo espero que no estés lejos.
Cuando la segunda deja mi mano, desearía poder oirte decir:
'Ni siquiera arrojes la tercera, estaba aquí y he oído que podríamos estar juntos'
Ella es mi canción y melodía"
El puesto de golosinas apenas duró un par de temporadas. En 1995 la banda se disolvió. Tim Buckley -nada que ver con el músico y padre de Jeff Buckley- inició un proyecto en solitario y los otros tres miembros del grupo, Mike Jarvis, Nick Randazzo y Jack Rice, formaron The Lackloves, una banda que siguió los pasos de The Blow Pops y grabó cuatro espléndidos discos en la primera década del nuevo milenio.