En "2000 miles" Chrissie Hynde habla de campanas que tañen, noches heladas, nieve que cae y niños que cantan, un decorado clásico para una postal navideña envuelto en guitarras angelicales.
Pero al rasgar el papel celofán aparece un retrato emotivo y doloroso de la ausencia: 2.000 millas es mucha distancia, seguramente demasiada, seguramente defintiva. En el tiempo del reencuentro, la ausencia se clava en el alma más que nunca.
Puede que sean dos amantes separados por miles de kilómetros; puede que sea un soldado que esperaba volver en Navidad y tendrá que quedarse en el frente; o peor, puede que sea alguien que ya jamás volverá.
En junio de 1982 James Honeyman-Scott, guitarrista original de The Pretenders y creador junto a Hynde del rompedor sonido de la banda en sus primeros álbumes, murió de sobredosis. Meses después también murió, y por la misma causa, el bajista Pete Farndon, que había sido expulsado del grupo, por su adicción a las drogas, dos días antes de la muerte de Honeyman-Scott.
"2000 Miles" fue lo primero que Chrissie Hynde publicó después de estas tragedias, en Navidades de 1983 y como adelanto de "Learning To Crawl", el tercer álbum de Pretenders. La ausencia de Honeyman-Scott estaba presente no solo en "2.000 Miles", también en la fantástica "Back on The Chain Gang".
Con Robbie MaIntosh -Manfred Mann- a la guitarra y Malcolm Foster al bajo, "2000 Miles" escaló las listas británicas y se convirtió en clásico navideño, seguramente uno de los más tristes del género. Aunque cualquiera lo diría viendo el vídeo, con Hynde esquiando entre toneladas de nieve y rodeada de parafernalia navideña.