Durante unos minutos, los que dura una buena canción, el mundo puede ser un lugar casi perfecto. Porque el rock and roll es, sobre todo, un sentimiento. Un sentimiento importante.
Da igual lo que haya pasado antes o lo que va a pasar después. Da igual si mañana tienes clase en el instituto o si estás pensando en jubilarte. Cuando se suceden esos mágicos acordes, las emociones de todos se funden en una sola, no hay preocupaciones, no hay problemas, “siempre hay soluciones”.
Esa emoción sacudió la madrileña sala But en el concierto que dio Mujeres para celebrar el aniversario de ‘Un sentimiento importante’(2017), su tercer álbum, el primero que grabaron en español y que inició el camino que ha conducido al trío barcelonés a convertirse en una referencia imprescindible del rock español.
Tocaron las 10 canciones del disco, incluida alguna que, según explicaron, nunca había sonado en directo. Pero para cuando se escucharon los primeros guitarrazos de ‘Vete con él’, la que abre ese álbum, Mujeres ya había puesto boca abajo la muy llena sala But (Ochoymedio), con su irresistible comienzo: ‘Cae la noche’, ‘Besos’, ‘Rock y amistad’ y ‘Un gesto brillante’.
Mujeres toman cosas del punk de los noventa, de la nueva ola española de los ochenta, del garaje... pero lo que importa es su facilidad para componer himnos instantáneos que sus seguidores, jóvenes y veteranos, cantan eufóricos, brazos en alto, saltando, haciendo pogo.
Porque ese es el sentimiento que encuentras siempre en un concierto de Mujeres: un entusiasmo colectivo que inunda toda la sala. Un entusiasmo que sube y sube cuando atacan ‘Si piensas en mí’, ‘No puedo más’, ‘Tú y yo’, ‘Aquellos ojos’, ‘Romance romántico’, ‘Al final Abrazos’… o ‘Un sentimiento importante’, que esta vez, como siempre en realidad, sonó dos veces: primero durante la interpretación íntegra del álbum homenajeado, y luego al final del concierto, con la euforia ya desbordada.
Además de su repertorio imbatible, el trío regaló algunas sorpresas, como ‘Alucinante’, una canción nueva que interpretaron con Bárbara (Aiko el Grupo); o ‘Cardio y caladas’, con la intervención de Diosito, de La Élite, el grupo junto al que la grabaron el año pasado.
Y todavía se guardaron ‘No volveré’ (Kokoshca) para rematar una velada fantástica, una inyección de alegría con efectos que aún se sentían en los bares de la zona después del concierto, con la gente coreando espontáneamente -¿lo adivinan?- ‘Un sentimiento importante’.
Si Mujeres pasan cerca de su casa, no se lo pierdan. Sin duda, será un “gesto brillante”.