Los Barracudas emergieron fugazmente a la superficie en el verano de 1980, cuando "Summer Fun", un single incluído en su álbum "Drop Out with the Barracudas" alcanzó el número 37 de las listas británicas.

No volvieron a tener un "Hit", pero permanecieron como una banda de culto durante un tiempo, en particular en España, donde lograron una parroquia de seguidores fiel ya incluso antes de su mítica primera visita al Rock Ola madrileño, que incluyó un cacheo policial a los asistentes a mitad de actuación, según indican las crónicas.

Al rock le envolvía todavía entonces, al menos por estos pagos, un halo de peligrosidad y aparentaba ser algo más que otro producto de consumo en la estantería. Que en las salas de conciertos se fumaran porros seguro que ayudaba.
Los Barracudas, una banda nacida en Londres, pero que unía en sus filas a norteamericanos y británicos, mezclaban psicodelia, surf, punk, garaje y beat de los sesenta, pero eran capaces de trascender el "revival" y ofrecer música con personalidad propia.

Sobre todo, escribían grandes canciones. En "Drop Out..." hay una detrás de la otra desde la inicial "I Can't Pretend". "Surfers Are Back", "I Wise It Could Be 1965 Again", "His Last Summer", "Violent Times"...
"Summer Fun" empieza con unos locutores perdidos en un trabalenguas cuando intentan pronunciar correctamente el nombre del grupo y a continuación un escueto punteo de guitarra y unos redobles de batería dan la señal para que comience la fiesta.

No me importa el resto del año / Esto es lo que quiero hacer
Ha salido el sol / el sentimiento es bueno
todo depende de ti / en la diversión al sol del verano
Vamos chica, no me digas quizás / Tienes que ser mi chica del verano

El espíritu del verano en tres minutos. Las clases han terminado y un placentero horizonte sin sombras se abre delante de ti sin que apenas puedas divisar el final. ¿Suena bien, no?
Los Barracudas no se mantuvieron siempre tan festivos. En su siguiente álbum, "Mean Time", ya con Chris Wilson (Flamin Groovies) junto al núcleo fundador -Robin Wills (guitarrista) y Jeremy Gluck (cantante)-, se acercaron a derroteros más psicodélicos y a un sonido a mitad de camino entre los Groovies y los Byrds, donde no quedaba rastro de las playas y las olas de "Drop out..."

Es verano. Tiempo de "Summer Fun". Tiempo de Barracudas.