Los Ramones tenían, básicamente, dos tipos de canciones: las que enseguida te vienen a la mente, una saga que empezó al grito de "Hey, oh, let´s go"!! en su primigenio "Blitzkrieg Bop", y las del tipo, digamos, Ronnettes, baladas de almíbar que tienen el molde en "I Wanna be your boyfriend", también de su primer disco, "Ramones".
La que viene hoy es de las segundas, y pasó desapercibida. Estaba incluida en "End of the Century", el disco que les produjo Phil Spector, precisamente el artífice de las Ronnettes y las Crystals y....el muro de sonido.
Entre carrera y carrera para evitar los cuchillos que el chalado de Spector les lanzaba, los ceporros de Queens se las apañaron para grabar la historia del amoroso Danny, que tenía que ir a Idaho, pero no podía surfear allí porque hacía 20 bajo cero (bah, en realidad sólo eran 6 bajo cero de los nuestros, que los yankis usan fahrenheit).
"Dando una vuelta por Los Ángeles/ y ningún sitio para ir/ no es Navidad si no hay nieve/ escuchando en la radio a Sheena/ No puedo esperar a estar contigo mañana", dice Joey Ramone, un alma tierna y cándida después de todo, que incluyó en la historia a Sheena ( la punk rocker que da título a una de las canciones de su tercer disco, "Rocket to Rusia") y a Danny, en referencia al mánager de la banda, Danny Fields.
No se si alguien podría imaginar a Tom Waits haciendo una versión de esto. Pero el hombre la hizo. Y yo se lo agradezco. Porque ahora me siento acompañado y justificado cada vez que, una vez más, me dejo arrullar por los dulces "oh,oh,oh" de "Danny says".
