¿Qué une a Bruce Sprinsteen, Elvis Costello, Billie Joe Armstrong, (Green Day), Lucinda Williams, Counting Crows, Graham Paker, Ian Hunter o Dinosaur Jr?
¿La pasión por Bob Dylan, Chuck Berry o los Beatles?… seguramente. Pero a día de hoy la respuesta correcta no es el nombre de un artista legendario sino el de un músico de culto neoyorquino: Jesse Malin, quien, y ya que estamos en estas fechas, es el protagonista de un bonito cuento de Navidad.
Y es que todos estos músicos y otros muchos más, como el ya fallecido Wayne Kramer (MC5), Steve Van Zandt, Bleachers, Hold Steady, Susanna Hoffs (Bangles), Wallflowers, Alejandro Escovedo o Rancid, hasta un total de 27, han grabado alguna canción de Malin para ‘Silver Patrol Saints’, un álbum cuyos beneficios se destinan a pagar el tratamiento de recuperación que Jesse sigue desde que hace año y medio sufrió un accidente vascular que le dejó sin movilidad de cintura para abajo.
Muchos de ellos estuvieron también el 1 y 2 de diciembre en Nueva York en el concierto que supuso la vuelta a los escenarios de Jesse. Emocionante ver al artista rematando la función con una versión de Rudie Can’t Fail (The Clash) y abandonando el escenario que, hace apenas unos meses, vería como un sueño lejano.
Más allá de su encomiable propósito ‘Silver Patrol Saints’ es una delicia, un repaso por la trayectoria de Malin a cargo de artistas de primera fila lleno de interpretaciones brillantes.
Y si no, escuchen como la guitarra de J. Mascis le regala un vestido nuevo a la hermosa ‘Brooklin’, como la voz del Boss llena de soul ‘She Don’t Love Me Now’, o como a Willie Nile le sienta como un guante ‘All The Way From Moscow’.
Elvis Costello y Lucinda Williams emocionan en ‘Room 13’, una canción que compuso Lucinda junto a Malin en 2019; Graham Parker brilla en ‘Greener Pastures’; Aaron Lee Tasjan transforma ‘Shining down’ en una preciosa balada y Hold Steady llena de ritmo y estribillos ‘Death Star’.
Podríamos seguir, pero mucho mejor escucharlo.
Las versiones se ciñen casi exclusivamente a los años de Malin en solitario, con un leve recordatorio de du primera banda, Heart Attack, a cargo de Agnostic Front; y un par de incursiones en D Generation, el grupo que le dio a conocer, realizadas por Rancid y Murphy’s Law.
Silver Patrol Saints’ muestra, como mínimo, un par de cosas: que Jesse Malin tiene muchos amigos entre sus compañeros de profesión y que su variado repertorio puede no ser famoso, pero está lleno de magníficas canciones.
El músico ya anuncia para la primavera un concierto en Londres. Ojalá vengan muchos más y podamos disfrutarle también por aquí.
