Hay canciones que descubres de forma imprevista. A veces en circunstancias extrañas, donde nunca esperarías encontrarlas. En ocasiones, aunque es la primera vez que la oyes, te parece que la conoces desde hace mucho tiempo.
Algo así experimenté yo con "Queen of Eyes", de los Soft Boys, el grupo que lideraba a finales de los setenta el singular Robyn Hitchcock, uno de los grandes talentos de la música británica que lleva cinco décadas, mayormente en la penumbra, escribiendo canciones bellas y extrañas, que hablan de la vida cotidiana bajo el prisma de un humor surrealista.
"Queen of Eyes" estaba incluida en "Underwater Moonlight", un álbum grabado en 1980 por los Soft Boys, aclamado por la crítica y que permanece como una de las obras más completas en las que ha participado Hitchcock, que bebía de las fuentes de los Beatles, los Byrds y Syd Barrett (Pink Floyd).
Aquí estoy de nuevo, no es una sorpresa,
atrapado en una órbita que gira alrededor de la reina de los ojos.
Todo lo que obtuve de ella fueron mentiras.
En esta horrible época de abusos y decadencia
es bueno saber que alguien tiene buen aspecto
No sé por qué ella nunca llega a nada contigo.
Desde que escuché por primera vez los acordes de la "Reina de los ojos" yo también quedé atrapado en su órbita, y aunque sé que tampoco llegará a nada conmigo estoy encantado de seguir dando vueltas y vueltas mientras la música suena.
