The Nerves: Colgados del teléfono
Pocos podían pensar que un batería de un grupo pre-punk nacido en California acabaría siendo uno de los artistas que con más cariño acogen las salas rockeras de nuestro país. Paul Collins, ese tipo entrañable que ha tenido todo tipo de colaboraciones, negocios, conciertos y hasta nos ha dedicado canciones fue uno de las tres mentes lúcidas que fundaron The Nerves en el año 1974. Los otros dos fueron Jack Lee y Peter Case. La familia de Paul Collins como la de tantos músicos era bastante nómada a consecuencia del trabajo de su padre, un civil que trabajaba para el ejército estadounidense. Así, hasta los catorce años estuvo en Grecia, Vietnam y algunos otros países. A partir de esa edad aterrizó en Nueva York, su ciudad natal, donde asiste a una High School de Manhattan y posteriormente estudia música en la Julliard School.
En 1973, con dieciocho años, se tralada a San Francisco donde comienza a buscar un grupo de rock and roll que hiciese lo que a él le gustaba y que en aquel entonces no tenía nombre: me refiero al power-pop, la new wave, el punk-rock. Él por aquel entonces conocía el sonido de los Ramones y le entusiasmaban.
Por otro lado, Peter Case, ya desde bien joven tocaba el bajo con grupos de bar en bar llegando desde su Buffalo natal a San Francisco en el mismo año. La tercera pata de The Nerves, el guitarrista Jack Lee, llego a California al mismo tiempo que los otros, aunque había nacido en Alaska. La idea para Hanging The Telephone le vino de ver la portada de un libro de letras de The Beatles. En la ilustración que acompañaba All I got to do había una chica con teléfono envolviendo su cuello, lo que le inspiró la canción que pasaría a la historia, no solo como un gran tema de The Nerves, sino también como uno de los temas más conocidos que interpretaría Blondie. Las circunstancias favorables de la época, donde imperaba el do it yourself (háztelo tú mismo) hizo que el primer y único EP de The Nerves fuera autoproducido en el año 1976. Se trasladaron a Los Ángeles donde se introdujeron en el circuito punk y new wave compartiendo cartel con The Weirdos, The Screamers, The Zippers y The Dills, entre otros, siguiendo con la teoría DIY, yo me lo guiso y yo me lo como, tan de boga en aquellos días. Hoy en día es tarea imposible hacerse un ejemplar de ese EP, distribuido en su día por Bomp Records, pero internet ha acudido en nuestra salvación y aquí lo puedes escuchar sin problemas. La otra canción firmada por Lee fue Give me some time, Woorking too hard fue firmada por Collins, y When you find out por Case. La verdad es que si hubieran hecho tres Lps tendrían un single para cada uno ya que son canciones pegadizas, redondas, que han soportado muy bien el paso del tiempo, siendo además el típico modelo de canción power-pop. De los Ángeles a Nueva York, The Magical Blistering Tour,sin manager, sin casa discográfica, y...sin futuro. The Nerves estaban fuera de juego, las causas no trascendieron. 
Dos años después, en el tercer Lp de Blondie, Parallel lines, se incluyó Hanging on the telephone, que había sido escuchada y descubierta por ellos en las sesiones de grabación de The Nerves, en una versión nuevaolera y cuyo éxito superó con creces el del original., llegando al puesto 5º de las listas del Reino Unido.Posteriormente, junto con algunas canciones que había escrito principalmente Jack Lee, pero nunca editado sacaron un LP en vinilo en el año 1986., incluyendo el famoso EP. 
Y en su 25 aniversario sacaron un Cd con todos sus temas.
Después de su última exposición, My Love is not dead, con la que participó junto a la Galería Cànem en Arco, Héctor Sos, artista castellonense de amplia trayectoria, se confirma como un autor que llega a la gente joven.
