Mientras  esperamos que este octubre vea la luz el documental 'Supersonic', sobre las idas y venidas de los hermanos Gallagher por los senderos de la música y de la fama, conviene recordar que, por debajo del ruido que siempre ha generado, Oasis ha aportado al tablero del pop británico canciones esplendidas que han trascendido su tiempo y sus circunstancias.

Habrá que convenir que 'Some Might Say' es una de ellas. Primer single del segundo álbum del grupo, '(What's the story) Morning Glory?" (1995), fue también el primer número uno de los Gallagher en las listas del Reino Unido. Y fue asimismo la última canción grabada con el grupo por el batería de la formación original, Tony McCarroll, sustituido por Alan White en el resto de temas del disco. El carácter de los hermanos empezaba a causar estragos.

Lo bueno de los artistas de abultado ego es que hablan mucho de sí mismos. Gracias a ello conocemos bastantes cosas, ciertas o inventadas, sobre esta primera creación de éxito de Noel Gallagher. Según él, 'Some Might Say' es 'la canción típica de Oasis', la que define la esencia del grupo.  También ha contado que, sin ser él "ni religioso ni espiritual", el tema habla de cómo la religión explota a los pobres: "Los más pobres del mundo tienen a Dios. Es todo lo que tienen. Supongo que la idea del cielo es la que permite a los pobres seguir adelante. El resto no vemos a Dios a diario, ¿verdad?". 

Algunos podrían decir que el rayo de sol sigue al trueno.

Ve a decírselo al hombre que no sabe brillar.

Algunos podrían decir que nunca deberíamos reflexionar sobre nuestros pensamientos de hoy

porque cambiarán con el tiempo.

Algunos podrían decir que encontraremos un día más luminoso

porque he estado esperando en la estación,

necesitando una educación bajo la lluvia.

Una vez más no preparaste mi reputación.

El fregadero está lleno de peces

y ella tiene platos sucios en el cerebro.

Rebosaba poco a poco pero todo es elemental, amigo mío.

Algunos podrían decir que no creen en el cielo.

Ve a decírselo el hombre que vive en el infierno.

Algunos podrían decir que obtienes lo que te dan.

Si tú no consigues lo tuyo, yo tampoco tendré lo mío.

Liam Gallagher, el provocador, el pendenciero, el arrogante, pone todo  este 'background' al servicio de su voz y amenaza con echar las tripas por la boca cuando canta.

Siempre fiel a su estilo, Liam no se presentó a trabajar en el día en que iba a filmarse el vídeo de la canción, que hubo que armar con retales de otras grabaciones. El resultado final es una curiosa sucesión de colgados, hecha como por encargo para alimentar el lado oscuro del fenómeno Oasis.