Cada año, cuando llega agosto, se repite en prensa y televisión esa tópica postal de ciudades sin coches, con tiendas y bares cerrados y calles sobre las que cae un sol inmisericorde y por las que no pasea un alma.

Pero esa soledad aparente también tiene su reverso. De pronto todo se vuelve accesible. Travesías eternas se convierten en viajes de 10 minutos. Lugares agobiantes en plácidos rincones. Ceños fruncidos en miradas cómplices. Una oportunidad para explorar, para descubrir...  

Sin embargo, el protagonista de nuestra canción, "Alone in the City", de Los Pepes, no tiene ganas de descubrir nada. No se ha quedado solo en la ciudad por ningún puente vacacional sino porque  su chica se ha ido.

Aun así, "Alone in the City", incluida en "Los Pepes for Everyone" (2014), es una medicina eficaz contra la melancolía existencial y la indolencia veraniega. Y hasta contra el calor. Sus acordes se introducen en el sistema nervioso y producen una inmediata y refrescante sensación de entusiasmo, que con el complemento adecuado puede ser de efecto duradero.  

De esta banda británica hemos hablado ya en Magnetófono, así que sólo recordaremos que a finales de mayo estuvieron en Madrid y dieron un concierto lleno de energía, entrega y convicción.

No había mucha gente viéndolos y pocos conocían sus canciones, pero en la sala latía el intangible espíritu del rock and roll. El que no necesita multitudes, ni artificios. Como una noche de agosto. Sólo buenas canciones y sentimiento a uno y otro lado del escenario.