Poco después de encarnar a As de Oros en Quadrofenia, supermod ("face") de fin de semana y botones en día laborable, Sting se presentó al mundo con Police y en un par de tardes se convirtió en estrella planetaria.

También aquí había algo de impostura, porque el trío (Andy Summers y Stuart Coppeland), que se sumó a la plataforma de despegue que ofrecía el estallido del punk y la nueva ola, tenía poco que ver con sus irreverentes compañeros de viaje. Se distinguían, sobre todo,  en que sabían tocar muy bien.

De hecho habían hecho pinitos en los territorios del jazz, por lo que se sentían legitimados a mirar por encima del hombro a sus contemporáneos, quienes a su vez no ocultaban su recelo en tiempos en los que ser un virtuoso instrumentista era casi un delito.

Su primer disco, Outlandos d'Amour (1978), reunía lo mejor de los dos mundos. La frescura, el descaro y la inspiración  "amateur"  nuevaolera, con la  pericia y creatividad que aportaban ellos y que alumbró un sonido novedoso bautizado como reggae blanco.

"Roxanne" fue la canción que les puso en el mapa, pero dentro del álbum, entre otras joyas, estaba "So Lonely". Sting ha hecho muchas cosas en su carrera, con y sin Police, pero¿algo mejor que esto?.

La cadencia caribeña que  se acelera hasta embalarse y transformarse en una tormenta, la guitarra encendida de Andy Summers y el rubio cantante desgañitándose para decirnos que le han dejado y él se siente muy muy solito (como si alguien fuera a creerle, qué cosas).

Nadie ha llamado a mi puerta en un millón de años o más

Arreglado y sin un ningún sitio al que ir

Bienvenido al show del hombre solo

 

Siéntate, siempre hay sitios libres

No hay sorpresa ni misterio

En este teatro que llamo mi alma

Siempre hago el papel principal