No hay ninguna necesidad de hacer la prueba del ADN para asegurar que el verdadero padre del Rock And Roll fue Chuck Berry.

Su muerte a los 90 años nos ha dejado huérfanos a todos los que amamos esos compases que rompieron con todo a mediados de los 50 y permanecen tan frescos como una lechuga recién cortada.

Legión de discípulos

Otros le antecedieron como Bill Haley, Elvis Presley, Little Richard o Fats Domino pero este criollo de St. Louis (Missouri) compuso los que probablemente son los fraseos de guitarra más imitados y propagados del orbe.

Todo empezó con Maybellene en 1955, naturalmente en el sello Chess, y le siguieron Roll Over Beethoven (1956), Rock And Roll Music (1957), Sweet Little Sixteen (1958), Memphis, Tennessee (1958) y la ya mítica Johnny B. Goode (1958), entre tantas y tantas otras joyas.

Cuánto le deben los que con el paso del tiempo han sido las bandas y artistas más reconocidos como Beatles, Rolling Stones. Beach Boys, el propio Elvis Presley, Yardbirds, Bob Seger, Animals, Kinks…

Activo casi hasta su muerte, Charles Edward Anderson Berry seguía actuando regularmente en el Blueberry Hill Club de su nativa St. Louis.

My Darlin', regalo póstumo

Para la leyenda deja un disco póstumo grabado y que ya se había anunciado hace semanas que vería la luz en este 2017: My Darlin, dedicado a su viuda de 58 años Themetta y compuesto de material original, algo que no ocurría desde 1979 con Rock It

Última vista a España en 2005

Chuck Berry visitó España por última vez en 2005, es decir ya estaba próximo a cumplir 78 años (nació el 18 de octubre de 1926).

Pudimos hacerle reverencias al genio en La Riviera en un concierto memorable, con la J. Teixi Band de telonera. Cuando salió a escena presentado por Javier Teixidor lo hizo con su genuino paso de la oca, danzando con una pierna por delante y punteando como solo él sabía hacerlo.

A diferencia de otras estrellas del rock, en sus conciertos no pedía extravagancias. Un coche que él conducía, siempre acompañado de su guitarra, y otro vehículo por delante que le fuera marcando el recorrido. Eso sí, exigía cobrar en metálico. Quizás por ello también llevaba siempre una maleta.

Otra anécdota de la actuación en la madrileña La Riviera es que antes del concierto se fue a Vips para zamparse un pollo asado. Le debió sentar bien porque sobre el escenario repasó varias sus grandes canciones con un magnetismo en escena que nunca podremos olvidar.

Legado inmortal

Entre discos originales, recopilaciones y directos la producción musical de Chuck Berry es inabarcable.

De entre las más recientes recomendamos el cd doble masterizado The Anthology con 50 temas que van desde el debut con la mencionada Maybellene (1955) hasta sus grabaciones en Londres en 1972 con My Ding-A-Ling (curiosamente su único número 1) y Bio en 1973 con Elephant's Memory, banda entonces de su discípulo John Lennon (se incluye vídeo con el Beatle tocando Johnny Be Goode)

School Day, Brown Eyed Handsome Man, Too  ugh Monkey Business, Reelin' And Rockin', Around And Around, Carol, Sweet Little Rock And Roller, Little Queenie, Back In The USA, I'm Talking About You, You Never Can Tell, Come On, No Particular To Go y hasta la navideña Run Rudolph Run son otros temas eternos de nuestro immortal Chuck.

¡A disfrutarlo, háganme el favor!