Las nuevas tecnologías de la comunicación han destruido gran parte de la magia en lo que a forma de descubrir y escuchar propuestas musicales se refiere. Bien, vale, el termino destruir puede parecer algo exagerado. ¿Alguien aceptaría mejor el verbo reconvertir?.

Lo cierto es que gracias a Internet la oferta es prácticamente inabarcable e inagotable. Y es que con la cantidad de blogs, con las redes sociales masificadas y con el progresivo abaratamiento de los costes de grabación, hoy en día es posible para cualquier músico editar y colgar sonidos que pueden bascular desde lo ridículo a la verdaderamente sublime.

Descubrir nuevos nombres en el ciberespacio es como ir a pescar: nunca sabes qué es lo que vas a conseguir ese día.

Todo esto viene a propósito del TREMENDO DISCO que por pura casualidad ha llegado a mis manos desde la evocadora localidad sureña de Decatur en el estado norteamericano de Georgia.

Sus responsables responden al nombre de Chris Maughan & the Missing Ace, con un tesoro musical titulado "Be Happy".

Nula información sobre ellos en la Red Global. No obstante me atrevo a enviar un mensaje a alguien que se llama igual que el protagonista y zas ¡¡¡. La respuesta positiva vía Facebook me pone en contacto con un amabilísimo tipo que dice tener una banda amateur llamada Back on the Freakout y que es amante de sonidos tan clásicos como los de los Replacements o los Stones.

También añade que The Missing Ace no existen en la realidad ya que él ha sido el único responsable del álbum en todos los aspectos vocales e instrumentales.

Increíble, porque el álbum, aunque de sonido bajo en presupuesto, suena como un colectivo musical, muy alejado del típico esquema del "songwriter" al uso. Además, Muaghan me dice que estará encantado de enviarme unas cuantas copies de "Be Happy" en cuanto sus obligaciones laborales diarias se lo permitan.

Chris arranca su colección con rotundos y espesos guitar riffs que rememoran a bandas hoy olvidadas como Drivin'n'Cryin' y otras bestias pardas del denominado Nuevo Rock Americano de los 80's.

Pero el" groove" de "Phineas Gage" es el de un rocker adictivo al máximo. Chuck Prophet se apuntaría sin dudar a esta fiesta. Así se abre un disco. Pegando duro y a la yugular.

"Fireproof" es un rural swamp/rock de slides tan stonianas como pantanosas. La sombra del gran Jimbo Mathus no anda muy lejos. Por su parte "Didn't lose me Part 1" es brisa fresca bajo el porche, una preciosa balada americana tan sureña como relajada. Graneros eléctricos, perfume de magnolias al atardecer.

"Rich by now" aprieta el acelerador y nos introduce en sótanos eléctricos con la humedad alcohólica del garaje empapándolo todo. Mick Jagger o Roy Loney la cantarían encantados de la vida.

"Life ain't easy" podria aparecer en cualquier disco del gran John Fogerty. Un tema que camina alto y orgulloso de su entorno geográfico. La verdad es que el Sur musicalmente nunca se rindió.

"Please be sweet" es vehemencia "outlaw". Cruce de caminos de la calle Forajidos con la Avenida Actitud. Y un estribillo de terciopelo que Dwight Twilley bordaria.

El corte definitivo de todo el álbum es una balada de Cosmica Americana titulada "Selfish". Misterio y rock'n' roll. ¿Se puede pedir más?. El tema justificaría no solo este disco sino toda una carrera musical. Además contiene un punteo magistral, de los que te hacen decir woooow¡¡¡¡ Holy Shit¡¡¡. Conciso y fulminante como debe ser un punteo.

"Panic Attack" es funk rock aprendido en la escuela de Tony Joe White. Cocodrilos al acecho. Ten cuidado donde metes los pies porque aquí el agua está turbia.

En "Didn't lose me Part 2" habita el espíritu del Punk y del garage sound. Guitarras de épica imparable. Roky Erickson, cemento y decibelios.

El cierre del bar y del disco se acompaña de una maravillosa, escalofriante balada acústica titulada "I'll be happy". Grabada en riguroso directo. Sencillamente un broche de oro emocionante para un állbum que roza lo memorable. Para mí, un serio candidato a disco del año. Humilde en planteamientos técnicos. Colosal en sus resultados finales.

No se si este ARTISTA saldrá del anonimato algún día. Lo más probable es que pase desapercibido en el maremágnum de ediciones diarias. Lo que desde ya afirmo, es que CHRIS MAUGHAN, en un mundo algo más perfecto y justo que este en el que habitamos, debería tener un reconocimiento MASIVO. Do you remember Rock'n'Roll Radio?. Yo todavía sí.