De todos es sabido, ¿añorado?, que la mayor eclosión musical alternativa española se produjo con La Movida, pero sería injusto creer que no hubo continuidad.

Los nuevos sonidos grunge y de todo pelaje indie tuvieron su reflejo nacional con cantidad de bandas que afloraron en los siguientes años.

Corriente Alterna, recopilación editada por El País, es una atinada y versátil muestra de los sonidos que se cocinaron desde los 90 hasta bien entrado el nuevo siglo.

Para abrir boca nos encontramos con el gallego Xoel López, enmascarado en Deluxe, y una delicia de canción: Que No. Guitarras y base crudas atenuadas con una voz popera que se reafirma en que quiere ser cantante a pesar de todo.

Planetas y otras hierbas

Los granadinos Planetas, comandados por Jota, se han reafirmado como la quintaesencia entre el rock más visceral y melodías aterciopeladas con letras muy cercanas. Un Buen Día refleja una jornada ideal: no madrugar, cañitas, siesta, leer tebeos, vuelta al copeo y todo lo que acontece después….

Proseguimos con bandas clásicas que cantan en inglés.

Dover, con Serenade, que según confiesa la cantante y guitarrista Cristina Llanos, es la mejor canción que compuso. Extraída de su exitoso álbum Devil, medio millón de copias vendidas, supuso el acertado tránsito del grupo madrileño entre lo más rudo de lo que llegaba de Seattle (Nirvana, claro) y acomodos más placenteros.

Australian Blonde fueron acreditados como estandartes del Xixón Sound, aunque procedían de otros puntos de Asturias. Con estribillo pegadizo donde los haya, Chup Chup es una estupenda diversión power pop de la mano del cantante Fran Fernández.

Nos deslizamos hasta Antonio Arias, con probado pedigrí en la banda 091, este granadino se autoproclamó Lagartija Nick, en referencia a un tema de Bauhaus aunque con un estilo muy diferente en Nuevo Harlem, más apegada a las alcantarillas del barrio neoyorquino y con una batería incesante de Eric Jiménez.

No salimos de Granada para detenernos en Lori Meyers, que con Mi Realidad exponen su claro gancho sónico tan apreciado. Noni López se recrea con falsetes y un apoyo sostenido de guitarras y teclas.

Indie exitoso

Otro ejemplo de que indie y éxito no son incompatibles. Los madrileños Vetusta Morla lo consiguieron con canciones tan redondas como Un Día en el Mundo y esa voz arrastrada que se crece de Pucho, acompañada de las guitarras de Guille Galván y Juan Manuel Latorre.

"En tu cabeza está el eje del mal" canta descorazonado Jorge Martí con ricas guitarras de Pau Martí en una de las grandes de los valencianos La Habitación Roja.

El que suscribe confiesa debilidad por El Incendio de los barceloneses Sidonie, curtidos en la estética mod el poso continúa con los rasgueos y la voz de Marc Ros, coros y un desarrollo power pop para degustar.

Los catalanes Los Fresones Rebeldes, comandados por el batería Felipe Spada, nos retrotraen a la frescura del punk popero en las voces de Cristina Segura e Inés Bayo. Tan simple como atractiva.

Acústicas y desarrollo con teclados, ritmo vivo y reminiscencias claras de New Order pero con un toque parisino son la coctelera La Buena Vida y la agradable Magnesia que hasta recrean al final el tórrido dueto de Serge Gainsbourg y Jane Birkin en la clásica Je T'aime Moi Non Plus.

La nostalgia se apodera de los vigueses Piratas con Iván Ferreiro al mando en Años 80, su tema más reconocido y encantador regusto nuevaolero.

Completamos la recopilación con el mencionado Iván Ferreiro y Turnedó en un crescendo embaucador; el asturiano Nacho Vegas con Días Extraños y colaboración con Enrique Bunbury en ambiente muy pausado; la madrileña Lourdes Hernández escaparate de Russian Red con la minimalista y envolvente Cigarretes Revisited; y los catalanes Love Of Lesbian en un piano animado y la voz transgresora de Santi Balmes en Club de Fans de John Boyd

Valga este mosaico de las nuevas, ya quizás algo antiguas, músicas del panorama alternativo nacional.

¡A disfrutarlo, háganme el favor!

INDIE ESPAÑOL - CORRIENTE ALTERNA (1993 - 2014)

.1. Qué No Deluxe

.2. Un Buen Día Los Planetas

.3. Serenade Dover

.4. Chup Chup Australian Blonde

.5. Turnedó Iván Ferreiro

.6. Días Extraños Nacho Vegas

.7. Nuevo Harlem Lagartija Nick

.8. Cigarettes Revisited Russian Red

.9. Un Día En El Mundo Vetusta Morla

10 El Eje del Mal La Habitación Roja

11 Mi Realidad Lori Meyers

12 Club de Fans de John Boy Love Of Lesbian

13 El Incendio Sidonie

14 Los Fresones Rebeldes Al Amanecer

15 Magnesia La Buena Vida

16 Años 80 Piratas

 

 

 

 

Con el debido respeto y máxima reverencia al maestro Robert Johnson, Willie Dixon ha sido el más grande compositor de blues de la historia.

Este orondo contrabajista, boxeador en sus años mozos cuando llegó a ser campeón del peso pesado del estado de Illinois en 1937, es una figura fundamental en el desarrollo eléctrico del blues en Chicago.

Fichado por los hermanos Chess cuando fundaron el sello ya en los 50, Dixon se hizo imprescindible en el estudio tanto como músico, arreglista, productor, cantante y, por supuesto, compositor.

Prácticamente todos los artistas grabaron canciones suyas y ¡vaya elenco!: Muddy Waters, Howlin' Wolf, Little Walter, Bo Diddley, Lowell Fulson, Otis Rush, Sonny Boy Williamson o Koko Taylor, entre otros.

La más completa recopilación de su trayectoria es el doble cd The Chess Box que abarca más de una década, de 1955 a 1967. De su puño y letra salieron muchas de las más clásicas canciones de este sentimiento.

Muddy Waters

Empecemos por el gran Muddy Waters, el bluesman que definitivamente expandió por el mundo este género. Nativo al igual que Dixon de Mississippi y emigrado a Chicago, dónde fluyeron todos estos 'sonidos demoníacos', en los que las referencias sexuales eran mucho más explícitas que las de los entonces mojigatos blancos.

Hoochie Coochie Man, I'm Ready, I Just Want To Make Lo To You o You Shook Me son parte del catecismo del blues con la rugiente voz y la guitarra de Muddy Waters, a las que se añaden otras fundamentales como Young Fashioned Ways, You Need Love o The Same Thing. 

La armónica es uno de los instrumentos más definitorios del blues y uno de sus catedráticos fue Little Walter, que tiene el honor de abrir el disco con la genial My Babe. Este supremo soplador y cantante de Louisiana aporta más temas de obligada escucha como Mellow Down Easy o Dead Presidents.

El Lobo aullador

Capítulo con mayúsculas ocupa igualmente Howlín Wolf, ¡qué casualidad!, también originario de Mississippi y que recabó como tantos sureños en la 'Ciudad del viento'. 

Esta enormidad de la naturaleza (1,91 metros) con un vozarrón que podría, como de hecho hizo, abrir las entrañas de la tierra, nos sobrecoge con Evil.

Preámbulo de otras clásicas del 'Lobo aullador' como Spoonful, I Ain't Supertitious, Little Red Rooster, Built For Comfort o la suprema Back Door Man. "Soy el hombre de la puerta de atrás, los hombres no lo saben, pero sí las jovencitas". Como casi siempre, en este caso los Doors de Jim Morrison, fueron blancos los que la popularizaron.